DELICIOSA SALSA CHIMICHURRI

Instrucciones :

Prepara los ingredientes frescos: Lava bien el perejil y sécalo con cuidado. Luego, pícalo finamente. Pela los ajos y pícalos o tritúralos con un prensa ajos para que suelten todo su sabor. Si te gusta un toque más picante, puedes añadir ají molido (puedes usar también una guindilla pequeña, si prefieres algo más fuerte).

Mezcla los ingredientes secos: En un bol grande, coloca el perejil picado, los ajos, el orégano, el pimentón dulce y la sal. Remueve bien para que todos los ingredientes se mezclen de forma uniforme.

Añade los ingredientes líquidos: Incorpora el vinagre de vino tinto y el aceite de oliva. Si quieres un toque extra de frescura, añade el jugo de limón. Mezcla todo muy bien hasta que los ingredientes se integren.

Ajusta la textura: Si la salsa te queda muy espesa, añade una cucharada de agua para lograr la textura deseada. La salsa chimichurri no debe ser ni muy líquida ni tan espesa; debe tener una consistencia que se pueda esparcir, pero no demasiado densa.

Deja reposar: ¡La magia del chimichurri está en dejarlo reposar! Cubre el bol con plástico de cocina y deja reposar la salsa en la nevera durante al menos 1 hora. Esto permite que los sabores se mezclen y se intensifiquen. Si puedes esperar más tiempo, incluso hasta el día siguiente, ¡mejor!

Listo para servir: ¡Tu salsa chimichurri está lista para disfrutar! Sirve sobre carnes asadas, parrilladas, empanadas o incluso como aderezo para ensaladas. ¡Es un acompañante increíble!

Consejos adicionales:

Si te gusta un toque más ácido, puedes añadir un poco más de vinagre o limón.

También puedes ajustar el nivel de picante, dependiendo de tu gusto personal.

Si prefieres un chimichurri más suave, puedes reducir el ajo o el ají molido.